Los Gobiernos de cuatro países latinoamericanos —Bolivia, México, Colombia y Argentina— hicieron público un comunicado en el que manifiestan su preocupación por la destitución de Pedro Castillo del sitial de presidente de Perú y su posterior encarcelamiento.
Las masivas protestas contra la detención del expresidente Pedro Castillo y la intensidad de la represión estatal en Perú contra las movilizaciones populares, obligaron a las autoridades a cerrar este martes el aeropuerto internacional del Cusco y el servicio de trenes hacia la ciudadela de Machu Picchu.