El presidente Luis Arce Catacora, que participa en la reunión de Jefes de Estado y de Gobierno de la Organización del Tratado de Cooperación Amazónica (OTCA) que se desarrolla en Belém, Brasil, propuso siete líneas de acción a seguir para proteger y preservar la Amazonia, un patrimonio invaluable no solo para los ocho países que lo conforman, sino para la humanidad en su conjunto.
1. Fortalecer la institucionalidad del Organismo del Tratado de Cooperación Amazónica (OTCA) para mejorar la cooperación regional como organismo de gestión soberana de los territorios de la Amazonía.
2. Demandar financiamiento no reembolsable y directo, tecnologías innovadoras con liberación de patentes, desarrollo de capacidades, que garanticen el desarrollo de la región amazónica y de sus pueblos que lo habitan.
3. Participación activa de los mecanismos de integración regional, como la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) para articular esfuerzos con los objetivos de desarrollar investigación científica e innovación tecnológica para preservar nuestra Amazonia.
4. Encaminar alternativas de desarrollo sustentable de la Amazonía, del bosque, de sus sistemas de vida, y de los pueblos indígenas. La participación activa de los pueblos contribuye a generar propuestas y políticas basadas en las verdaderas necesidades de una población que vive en la Amazonia.
5. Promover una integración regional para enfrentar los desafíos críticos en la Amazonía que requieren de acciones integrales y coordinadas a nivel nacional e internacional. De políticas nacionales debemos pasar a políticas regionales.
6. Evitar cualquier forma de militarización extranjera o injerencia de las Organizaciones No Gubernamentales (ONG) con objetivos distintos a los que tienen los países de la región que tienen participación en la Amazonia.
7. Construcción de una agenda subregional para enfrentar la minería ilegal, el narcotráfico y el crimen organizado. Estos temas han dejado de ser meramente policiales, sino que son profundamente políticos y económicos por su impacto multidimensional en el medio ambiente y el ser humano.
Arce afirmó que la Madre Tierra enfrenta una grave crisis sin precedentes en la historia. La Amazonía, bosques, ríos y selvas enfrentan una crisis estructural que amenaza la vida. El mundo atraviesa múltiples y sistemáticas crisis estructurales que demuestran que la sobreexplotación de la naturaleza, ejercida principalmente por los países denominados desarrollados del occidente, afecta profundamente, principalmente, a las poblaciones en situación de vulnerabilidad, los sistemas alimentarios y los sistemas de vida.
En su discurso, el mandatario boliviano señaló que la Amazonía es un patrimonio invaluable no solo para los ocho países que lo conforman (Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, Guyana, Perú, Surinam y Venezuela), sino para la humanidad en su conjunto.
Dijo que es tiempo de actuar, “porque la Madre Tierra no puede esperar más”. El compromiso con la conservación y protección de la Amazonía debe ser firme y decidido. // Viceministerio de Comunicación