La embajadora de México en Bolivia, María Teresa Mercado, recibió este viernes la condecoración de la Legión de Honor Mariscal Andrés de Santa Cruz y Calahumana en el grado de Gran Cruz, la distinción más alta que entrega Bolivia por su labor y ayuda en el marco del derecho internacional, asilo político y el restablecimiento de las relaciones bilaterales entre ambos países.
La condecoración fue entregada por el canciller de Bolivia, Rogelio Mayta, quien destacó la valentía que tuvo la embajadora, quien, a pesar del hostigamiento que sufrió del gobierno de facto de Jeanine Añez, logró dar asilo al actual presidente Luis Arce, y a su persona, además de a otros políticos perseguidos de 2019.
“Hoy tenemos que agradecer mucho a México, sobre todo en el servicio realizado para que ahora los bolivianos no tengan que tramitar visa para viajar a México”, ponderó Mayta.
La embajadora Mercado, luego de 12 años de servicio diplomático en el país, se retira para realizar otras funciones enfocadas a la educación. El Gobierno de Bolivia, a través de la Cancillería, no quiso dejar pasar la oportunidad, considerando que con la diplomática se trabajó en varios temas.
Durante su gestión, por ejemplo, viabilizó el restablecimiento de las relaciones bilaterales y el diálogo con México, contribuyó a la gestión para que ambos gobiernos puedan desarrollar reuniones de la comisión binacional permanente, la subcomisión de asuntos políticos, las consultas consulares migratorias, entre otras acciones.
Mercado agradeció por la distinción máxima entregada por el país. Enfatizó que, en estos años de servicio, en especial de 2019, fue la más complicada por la interrupción del orden constitucional.
María Teresa Mercado cumplió cuatro años de misión en Bolivia. En 2020, sus funciones se vieron interrumpidas por la administración gubernamental de entonces, que la expulsó del país.
En 2021, Mercado reasumió su cargo y durante este periodo de labores participó en las gestiones para la reanudación de las relaciones bilaterales de México con Bolivia, así como la supresión de la visa de ingreso de los bolivianos a México, y viceversa; la colaboración de México a Bolivia en vacunas contra la Covid-19, además de las reuniones de consultas consulares migratorias, entre otros servicios que beneficiaron al Estado boliviano. // Ahora El Pueblo